El Palacio Presidencial es un testimonio de dicha historia, también es un retrato de las vicisitudes históricas de Nanjing y un precioso lugar histórico y cultural de interés turístico.

El panorama iluminado del río Qinhuai siempre es una ensoñación inolvidable para mucha gente. El antiguo río Qinhuai es una parte inseparable de la antigua capital de Nanjing. Tomando un barco por el río, con los sonidos de los remos y las lámparas y sombras de los barcos, uno parece volver a los tiempos pasados.

Antes, el río Qinhuai era el canal principal de la ciudad de Nanjing, cuya longitud total alcanzó los 110 kilómetros. Dicen que fue construido por el primer Emperador de la Dinastía Qin (221-206 antes de nuestra era).

Hace más de mil años, los altos funcionarios empezaron a construir grandiosas residencias en ambas orillas del río. Las residencias conviven armoniosamente con el panorama hermoso del río Qinhuai, como un dibujo tradicional en tinta china, atrayendo a numerosas personas letradas.

En las Dinastías Ming y Qing, prosperaron la cultura folklórica y comercial en este lugar. Al caer la noche, sonaban los cantos y las músicas de baile por todas partes de las dos orillas. Los visitantes de todo el país llegaron allí, tomando un bote de recreo adornado, contemplando el atractivo panorama nocturno del río Qinhuai.

Actualmente, las orillas del río Qinhuai se han convertido en uno de los lugares más populares y animados de Nanjing. Las salones y viviendas a los dos lados del eje del Templo de Confucio y el río Qinhuai están junto a las tiendas y los restaurantes que se sitúan en un conjunto de construcciones de estilo Ming y Qing, formando una región integral de recreación y consumo que incluye el mercado, calles y los lugares de interés turístico.

Los visitantes toman un barco por el río en la noche con un derroche de luces. Algunos toman un rickshaw (cochecillo tirado por un hombre) para cruzar las animadas calles.

En esta región se venden más de 200 variedades de tentempiés locales. La comida ligera más famosa es la sopa de sangre de pato y fideo de almidón de batatas, una comida muy rica y barata muy popular entre la gente. El pato salado y el arroz remojado en té también son platos comunes de los habitantes locales. Tras pasar por demasiadas dificultades y penalidades, ahora la vida de los nankineses es apacible y tranquila.